El elemento de terreno de hoy es un bunker o edificio de control o lo que sea que haga falta para wargames de ciencia ficción de escalas 28-32mm.
He utilizado dos contenedores de plástico de tipo organizador (de maquillaje decía en la etiqueta). Es material duradero y resistente que evita la mayoría de problemas que presentan los materiales ligeros.
El contenedor pequeño tenía un precio de 0,70€ y el grande de 1,20€, no nos va a sacar de probres pero realmente es un material muy asequible.
Aprovechando la modularidad que dan los diferentes tamaños, y después de algunas pruebas, pegué las dos piezas con pegamento de plástico y empecé a decorar el edificio resultante con trozos de plástico, de matrices y hasta de una caja de caramelos con la tapa reconvertida en puerta.
Para dar algunos detalles más (el techo no los necesitaba dado lo interesante de la estructura) utilice topes de silicona autoadhesivos (me sobraban de las puertas de la cocina) y un detalle de madera cortada a laser que vendían en bolsita en el mismo bazar que compré las cajas.
Una vez terminada la estructura le di una capa de pintura de spray en base de agua (no vayamos a fundir el edificio por accidente a estas alturas), literalmente el único color que me quedaba por casa. Esta parte es importante para dar una base de agarre ya que luego se pinta encima con acrílico.
Finalmente, con un par de capas a brochazos para dar textura, un lavado marrón para dar sensación de óxido y un pincel seco para rematar ya tenemos el edificio. Las letras a plantilla son un añadido que no es para nada necesario pero le da cierto caracter al asunto :)
Las "luces" al lado de la puerta son los topes de silicona antes mencionados ;)